Este es el segundo año que vamos de camping con nuestros hijos. Las fechas elegidas son alrededor de San Juan, porque todavía no hace demasiado calor ni hay demasiada gente de vacaciones. Personalmente nos gusta ir a destinos con playa porque los niños aún son pequeños para hacer senderismo y en la playa podemos disfrutar todos cómodamente. Esperaremos a que crezcan un poco más para hacer rutas de senderismo. Intentamos ir a sitios que no estén a más de 5 o 6 horas en coche porque el trayecto es pesado para ellos y además nuestra hija mayor se marea mucho; tratamos de hacer viajes a sitios a los que se pueda acceder haciendo un tramo importante por autopista, llevamos comida, muchas canciones infantiles y hacemos coincidir parte del viaje con su siesta. Pienso que los niños se van acostumbrando poco a poco a ir en coche y si nos mentalizamos los viajes largos con ellos no se hacen tan cuesta arriba como parece.
El año pasado fuimos a un camping en la Costa Brava, el Sandaya Cypsela Resort, cerca de Pals, un sitio estupendo que os recomiendo visitar. Lo que nos sucedió es que no acertamos con el tiempo; en la Costa Brava a finales de junio todavía no hace demasiado calor, no apetecía bañarse en la piscina ni en la playa y algún día llovió mucho y tuvimos que estar encerrados en el bungalow viendo la tele y leyendo cuentos. Lo bueno de la Costa Brava es que hay pueblos muy bonitos y otras cosas que ver con los niños y cada tarde fuimos a visitar alguno de ellos.
Este año hemos ido al Camping Marjal Resort Guardamar, cerca de Guardamar del Segura (Alicante) también por San Juan. El concepto de este Resort es distinto al del que fuimos el año pasado, porque está muy orientado a familias con niños pequeños como la nuestra. Hacen muchas actividades para niños, fiestas temáticas, etc. Tiene dos piscinas con toboganes, camas elásticas, mini club y parque infantil. Nos hemos alojado con una pareja de amigos y sus hijos, que tienen la misma edad que los nuestros, en dos bungalows uno junto al otro y en una calle peatonal. La experiencia de viajar con otra familia ha sido buena, los niños se llevan bien, estaban muy entretenidos jugando y corriendo y los adultos podíamos tener nuestros ratos para hablar.
Las playas de Guardamar del Segura están muy bien y se accede fácilmente a ellas en coche desde el camping. Fuimos allí varios días por la mañana, nos divertimos y tomamos granizado y cerveza del chiringuito cercano. La noche de San Juan fuimos allí a ver la hoguera.
Recomiendo totalmente las vacaciones en un camping con niños porque:
- Estás en un espacio más abierto, cerca de la naturaleza.
- Ellos se sienten más independientes, campan a sus anchas y son felices teniendo su autonomía.
- Puedes comer y cenar al aire libre (a mis hijos les encanta).
- Tienes más libertad que en un hotel y la comodidad de encontrarte como en casa.
- El ambiente es distendido y relajado en cuanto a horarios.
- Hay alguna actividad, fiesta o cena para que se diviertan (siempre puedes no ir si no te gustan ese tipo de eventos).
- Necesitas poco equipaje: bañador, chanclas, ropa cómoda y poco más.
- Ideal para ir con bebés y hacerles su comida casera si te apetece.
- Si tiene la playa cerca la diversión está asegurada en caso de aburrirte de la piscina.
Ir de camping engancha, yo ya estoy pensando adónde iré el año que viene. Tal vez si sois más aventureros queráis ir con tienda de campaña. Seguro que a los niños les gusta todavía más, pero yo aún no me he animado a hacerlo.
